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Ejercicio y cáncer.

La inactividad física incrementa el riesgo de padecer cáncer de colon (aproximadamente en un 40%) y cáncer de pecho (aproximadamente en un 30%). El entrenamiento de fuerza o el estímulo neuromuscular suponen un importante factor de prevención en la prevención mortalidad de cáncer y de aparición del mismo (Ruiz et al., 2009; Wolfe, 2006). Niveles moderados de actividad física pueden suponer una estrategia profiláctica de gran valor (Cris et al., 2007), así como un factor coadyuvante durante el tratamiento o post-tratamiento. Por lo tanto, establecer un mínimo general de actividad física, que incluya entrenamiento de fuerza, resulta importante. Este mínimo, puede significar un punto de partida o un objetivo, en base a la directrices que deberá estar establecidas por el oncólogo, así como los ajustes y adaptaciones necesarias para la personalización del programa para le persona. Así mismo, la actividad física estará supeditada a los signos y síntomas que aparezcan en el o la paciente.

Dicho punto de partida ha sido establecido por el American College of Sports Medicine (2010),el American Cancer Society (2012) y algunos textos de referencia, pudiéndose resumir en la siguiente tabla.



Ejercicio aeróbico: caminar, pedalear
3-5 sesiones/semanales
50-75% Frecuencia cardíaca de reserva[1]
60-80% de frecuencia cardíaca máxima[2]
20-30 minutos fraccionados en periodos de 5-10 minutos e ir progresando
Fuerza: calistenia, bandas elásticas
2-3 sesiones semanales (días alternos)
2 series
20 repeticiones
8-12 ejercicios que involucren grandes grupos musculares (no afectados por la patología)
Flexibilidad: estiramientos
3-5 sesiones semanales
Intensidad moderada (Asistida)





[1] Frecuencia cardiaca de reserva= Frecuencia cardíaca máxima – Frecuencia cardíaca de reposo
Frecuencia de entrenamiento =( Frecuencia cardíaca de reserva * 05-0.75) + frecuencia de reposo

[2] Frecuencia cardíaca máxima (Tanaka et al., 2001) = 208- (0.7* edad).



Cris SA, Houmard JA, Kraus WE. Modest exercise prevents the progressive disease associated with physical inactivity. Exerc Sport Sci Rev 2007; 35 (1): 18-23.

Ruiz JR, Sui X, Lobelo F, et al. Muscular strength and adiposity as predictors of adulthood cancer mortality in men. Cancer Epidemiol Biomarker Prev 2009; 18 (5): 1468-76.

Wolfe RR. The underappreciated role of muscle in health and disease. Am J Clin Nutr 2006; 84: 475-82.

Schmitz K, Courneya KS, Matthews Ch et al. American College of Sports Medicine Rountable on Exercise Guidelines on Cancer Survivor. Med Sci Sports Exerc 2010 Doi: 10.1249/MSS.0b013e3181eOc12.

Rock ChL, Doyle C, Demark-Wahnefried W et al. Nutrition and physical guidelines for cancer survivors. CA Cancer J Clin 2012; 62: 242-274.


Nota del autor.

El presente artículo pretende realizar una breve recomendación general para este situación médica particular, lo cual NO SUSTITUIRÁ NUNCA, ni el diagnóstico ni el tratamiento tanto médico como terapéutico que se pueda haber emitido. Así mismo, se recomienda que si usted padece la situación tratada a lo largo del artículo, se ponga en contacto con su médico, fisioterapeuta o prescriptor de ejercicio para que puedan realizar un estudio profundo y personalizado de su situación, pudiendo ajustarle al máximo la realización de ejercicio físico o el tratamiento más acertado para usted.


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